Muchos de vosotros sabéis que soy un gran aficionado a los simuladores de vuelo y que hace muchos años que los utilizo. Alguna vez en este mismo blog os he hablado de la red de vuelo virtual a la que pertenezco y en la que mato el gusanillo volando de vez en cuando:
IVAOPero lo de esta tarde ha sido muchísimo mejor, me explico: ¿sabéis lo que es un bautizo de vuelo?
Te suben en una avioneta con un instructor de vuelo y te hacen una introducción y un pequeño vuelo de 30 minutos para que compruebes y sientas el placer y 'gusanillo' de volar.
Eran las 18:30h más o menos, estábamos en el aeródromo de Ódena (LEIG) en Igualada y la avioneta (o ultraligero para ser más exactos) era una
Tecnam P96 pero con unas prestaciones que nada tienen que envidiar a una Cessna 172, por ejemplo.
La verdad es que desde el minuto 0, tras hablar con el instructor (se llamaba Antonio) y comentarle que era aficionado a los simuladores y que tenía unas 500 horas registradas en IVAO de vuelo virtual, me ha dejado a los mandos de la P96 supervisando él todos mis movimientos, he comenzado realizando el rodaje a cabecera de la pista 17 de LEIG, el propio despeque tirando yo mismo de la palanca de mando así como el pilotaje y navegación visual por lo alrededores de Igualada. Antonio se encargaba de las comunicaciones por radio y antes y durante el vuelo me ha dado un curso intensivo de todos los mandos y controles que componen el cockpit de la P96, aunque siendo sincero ya conocía del propio Flight Simulator pero, no es lo mismo verlo en un monitor de PC que tenerlo delante de tus narices y a veces se me acumulaba el trabajo de controlar todos los relojes al mismo tiempo. Impone mucho como se mueve la avioneta cuando te encuentras alguna turbulencia de aire en tu camino ya que sientes como se mueve todo el aparato e impresiona un poquito. Tras realizar yo mismo el patrón o circuito visual de aterrizaje alrededor del aeródromo, Antonio ha tomado los mandos y a hecho aterrizar suavemente la P96 en la pista (no era cuestión de tentar a la suerte y hacerla aterrizar yo mismo... por lo que pudiera pasar!!! jejeje). Una vez fuera del aparato he pedido información de los curso de vuelos y certificaciones oficiales que realizan y me ha sorprendido que para este tipo de avionetas o ultraligeros, los cursos son bastante asequibles así que no descarto hacerlo en un futuro no muy lejano. Sin duda ha sido una gran experiencia. Gracias Anabel por este fabuloso regalo!